La Guardia Civil ha detenido a un joven de 18 años y origen marroquí como presunto autor de un delito de agresión sexual a una menor de edad.
El suceso ocurrió el pasado 18 de julio en Seseña (Toledo). La víctima, de 14 años, estaba participando en un botellón en esta localidad junto a un grupo de amigos, todos ellos menores.
Un grupo de jóvenes disuadieron a varias chicas para que acudieran al domicilio que compartían y seguir allí la fiesta. Ya en el interior de la vivienda, uno de los varones convenció a la menor para que lo acompañara a una habitación donde consumó la violación y le robó el teléfono móvil.
Horas más tarde, la víctima acudió junto a su madre al hospital «Virgen de la Salud» de Toledo manifestando que había sufrido una violación.
Informada la Guardia Civil de los hechos, se inició una investigación que ha desembocado semanas después en la detención del autor de la violación: un joven de 18 años con numerosos antecedentes policiales que se ocultaba en un piso del barrio madrileño de Villaverde.
Según la versión de la víctima, sus recuerdos acerca de lo ocurrido en el día de los hechos son borrosos ya que pudo ingerir alguna sustancia psicotrópica sin su consentimiento.
El detenido podría enfrentarse a una pena de entre 8 y 12 años de prisión, que es la condena establecida por el Código Penal para este tipo de delitos.