Le amenazaba con difundir un vídeo íntimo y le enviaba constantes mensajes de WhatsApp insistiéndole en que acudiera a la cita porque de lo contrario enviaría las imágenes a su familia.
Caminaba por la calle cuando se cruzó con un furgón del la Policía Local de Málaga. Desesperada se acercó a ellos y contó a los Agentes el infierno que estaba viviendo esa tarde: su exnovio la estaba chantajeando asegurándole que, si no acudía a una cita para mantener relaciones sexuales, iba a difundir un vídeo íntimo en el que aparecía la joven. Comenzó así un operativo que culminó poco después con la detención del chico en la zona del Soho de la capital.
Los hechos tuvieron lugar el pasado miércoles. Sobre las 19.40 horas, la víctima, una joven de 23 años y de nacionalidad española, se acercó a una dotación del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local de Málaga para contarles las amenazas de su exnovio, también español de 20 años de edad.
La joven indicó que le estaba insistiendo para que quedaran con el objetivo de que ella le diera dinero y mantuviera relaciones sexuales con él esa misma tarde en un lugar que ella tendría que abonar. Relató que su exnovio disponía de un vídeo en el que aparecían los dos practicando sexo y que le aseguraba que, si no hacía caso a sus pretensiones, se lo iba a mandar a su familia.
Los agentes del GOA informaron de la denuncia a sus compañeros del Grupo de Investigación y Protección (GIP), que se hicieron cargo del caso. Entonces establecieron un dispositivo, en el que dos Agentes, que trabajan vestidas de paisano, acompañaron de forma disimulada a la víctima hasta la calle Córdoba de la capital, que era el lugar donde el chico había citado a su exnovia.
Amenazas
Mientras las Policías Locales caminaban hacia el punto de encuentro junto a la víctima, pudieron observar como su expareja no paraba de enviarle mensajes a través de Whatsapp. En ellos continuaba con las amenazas y le preguntaba por el tiempo que iba a tardar en llegar, insistiéndole en que, si veía algo raro, lo iba a lamentar.
Cuando llegaron a la zona, allí se encontraba el joven esperando a la chica. Entonces, supuestamente, empezó a hacerle gestos a la víctima para que caminase hacia el local al que pretendía llevarla para mantener relaciones sexuales, un sex shop situado en las inmediaciones.
Los Policías Locales intervinieron inmediatamente, procediendo a su detención. En ese momento la joven se derrumbó y, en un estado de nerviosismo, llorando, confesó que el año pasado el ya detenido difundió un vídeo suyo de carácter sexual enviándoselo a una compañera. Las imágenes, según precisó, fueron visionadas por varias personas.
Sin embargo, la víctima aseguró que nunca había denunciado los hechos. Manifestó que tenía miedo a las posibles represalias si lo hacía, ya que su exnovio tiene un carácter muy agresivo con ella, habiéndole llegado a golpear en alguna ocasión que le había dicho que iba a contar lo sucedido a las Autoridades.